La producción mundial de maní con cáscara, se estima en alrededor de 37 millones de toneladas. Esta leguminosa originaria de América del Sur se cosecha hoy en más de cien países, pero unos pocos concentran más del 70%:de la recolección: China (40%), India (18%), Nigeria (8%) y Estados Unidos (6%). La participación argentina representa el 1 - 2 % de la cosecha mundial.

La mayor parte de la producción es consumida en los países de origen, por lo que el comercio mundial de maní representa sólo un pequeño porcentaje del volumen total obtenido. En este contexto, Argentina logró posicionarse como el segundo exportador mundial de maní comestible, después de China y precediendo a los Estados Unidos. Actualmente nuestro país es el primer proveedor de la Unión Europea.

Producción nacional

En Argentina el maní se cultiva principalmente en el centro y sur de la provincia de Córdoba donde las condiciones agroecológicas son óptimas para su desarrollo.

En la campaña 2005/06 la provincia mediterránea alcanzó el 90 % de las 350.000 toneladas producidas a nivel nacional. El resto se reparte entre San Luis, Salta, Formosa, Santa Fe, Jujuy y Corrientes.

El grano de maní comercial que actualmente se cultiva es del tipo Valencia o Virginia.

Para el cultivo se emplean dosis mínimas de agroquímicos y no se utilizan fertilizantes. Asimismo con el objetivo de preservar la sanidad del suelo y potenciar los rindes, se realiza rotación con soja, maíz y pasturas.

El método de siembra directa muestra una tendencia creciente, y en la actualidad alcanza al 40 % de la superficie implantada; en el 60 % restante se aplica siendo labranza mínima.

En algunos períodos, los productores abandonaban el cultivo de maní debido a su baja cotización, por lo que los industriales veían dificultado su abastecimiento de materia prima y resultaba difícil satisfacer la demanda de los clientes internacionales.

Para evitar esta situación, los procesadores de maní fueron articulándose con la producción primaria, a tal punto que en la actualidad más del 70% del maní es sembrado por los industriales del sector, ya sea directamente o en sociedad con los agricultores.

Investigación y mejoramiento

El mejoramiento constante de la producción de maní se sostiene en gran medida en la investigación científica. El INTA de Manfredi y Gral. Cabrera y las Universidades Nacionales de Río Cuarto y Córdoba junto con el aporte del sector privado llevan adelante diversos estudios orientados hacia el mejoramiento genético, la sanidad de semillas, la conservación de suelos, el manejo integrado del cultivo y la eficiencia en cosecha y poscosecha, entre otros temas.

Industria

La actividad industrial se halla emplazada en el centro–sur de Córdoba, cercanas a la principal zona de producción.

En los últimos años las industrias realizaron grandes inversiones en tecnología y actualmente se encuentran a la vanguardia a nivel mundial. El producto que ofrecen obedece a los estándares más altos, lo cual le permite acceder a los mercados más exigentes.

Dada la regionalización de la actividad, se ha desarrollado una industria metalmecánica de alta especialización que produce maquinarias y accesorios específicos para el cultivo y la industrialización de maní.

Cultivo y procesamiento

La siembra comienza a mediados de octubre de cada año. La planta requiere 140 días para la maduración óptima del maní. El primer paso de la cosecha consiste en invertir, mecánicamente la planta y dejarla durante siete días al aire libre en el mismo lugar de siembra para que se seque. De este modo, la humedad de las vainas se reduce aproximadamente del 40 al 20 % y luego son enviadas a las plantas procesadoras con una humedad máxima del 25 %.

El destino principal del maní que produce la Argentina es el consumo directo y el abastecimiento de la industria de snacks y confituras, enfocada principalmente hacia la exportación.

Las plantas reciben maní en vaina, también llamado “maní en caja” o “cáscara”. Sobre ellas se realizan una serie de análisis físico químicos que determinan su aptitud para la comercialización.

En el establecimiento, la materia prima es sometida a un proceso de prelimpieza y secado. Se la trata con aire caliente para reducirle el nivel de humedad a 8 – 10 % y prevenir el desarrollo de hongos y la generación de aflatoxinas. Posteriormente atraviesa las etapas de limpieza, descascarado y selección.

El producto que por sus características de limpieza, sanidad y homogeneidad, adquiridas a través del proceso de selección, está en condiciones de satisfacer el consumo humano se denomina maní confitería, y de acuerdo a su tamaño es clasificado en distintas categorías o calibres. Las categorías se establecen en función del número de granos enteros contenidos en una onza (28,35 gramos).

Posteriormente se realiza el embolsado para el que comúnmente se emplean bolsas de yute o bien big bags.

Cuando al maní descascarado se le elimina la piel, recibe el nombre de maní blancheado. Por su parte, los granos que presentan iguales características de limpieza sanidad y homogeneidad que el maní confitería pero se presentan separados en mitades, integran el denominado maní partido.

Las partidas que no cumplen las exigencias para su venta como maní confitería se destinan a la elaboración de aceite.

La exportación

Los principales productos del complejo destinados a la exportación son maní blancheado y maní confitería. Ambos representan casi el 90 % del total comercializado.

En la actualidad el producto de mayor importancia es el maní blancheado; en los últimos cinco años los volúmenes exportados han mostrado una sostenida tendencia creciente. De las 63.000 toneladas comercializadas en 2001 se llegó a casi 210.000 en 2006. Por el contrario, los precios unitarios descendieron de 900 a 729 dólares por tonelada entre los mismos años. En 2006 las exportaciones representaron más de 150 millones de dólares.

El principal bloque demandante es la Unión Europea, que concentra alrededor del 80 % de los embarques. Países Bajos (50 %), Francia (6 %), Polonia y Rusia (5 %) son los mayores compradores dentro de la Unión. En América, los mayores compradores son Chile (3 %) y México (2 %).

Tradicionalmente, el producto más exportado del complejo era el maní confitería, hasta que a partir de 2003 cedió su lugar al maní blancheado. En los últimos años la tendencia fue decreciente desde 2000 hasta 2004, pero se recuperó en los años siguientes. En 2006 se exportaron 158.000 toneladas por un valor superior a 100 millones de dólares.

Si bien existen numerosas empresas exportadoras, las dos primeras concentran el 45%, y si se consideran las cinco primeras, el 70 % del total comercializado. Pero en los últimos dos años se observó una tendencia a la desconcentración.

Los precios unitarios tuvieron un comportamiento oscilante; pasaron de 722 US$ ton. en 2001 a 794 en 2004. En 2006 promediaron los 671 dólares por tonelada.

Países Bajos (46%), Reino Unido (9%) y Argelia (7%) son los principales compradores. La Unión Europea en conjunto recibe casi el 65 % de los embarques.

Las dos principales exportadoras concentran, en promedio, el 28% de las ventas, y las cinco primeras suman el 55%. El resto se reparte entre un importante número de compañías.

Como se mencionó previamente la Unión Europea es uno de los destinos más importantes y uno de los que impone mayores exigencias. Los embarques a ese destino deben reunir:

  • Identificación positiva de lote.
  • Certificado fitosanitario oficial.
  • Certificado específico de aflatoxinas y
  • Etiquetado con leyenda específica dispuesta por la Comunidad.

Cada lote debe ser analizado por laboratorios especialmente acreditados (surveyors).

En el país funcionan tres surveyors autorizados por el gobierno nacional. Estos deben reunir una serie de requisitos tales como contar con la certificación ISO, rendir periódicamente un test de eficiencia de proceso y calibración así como cumplir con auditorías del laboratorio central del SENASA.

El maní argentino no presenta, salvo casos excepcionales, indicios de contaminantes. Está libre de metales pesados y los casos de aflatoxinas detectados son consecuencia de ciclos puntuales de adversidad climática en los que la planta ha sufrido stress hídrico. A diferencia de lo que ocurre en otros países productores de maní, nuestros suelos están libres de Aspergillus, el hongo que produce las aflatoxinas.

Manteca de maní

La manteca de maní, también llamada pasta de maní, se produce a partir de los granos de maní tostados, triturados y mezclados. Se le añaden emulsionantes para que el aceite liberado en la trituración se mantenga en suspensión.

Es otro importante producto de la industria procesadora de maní y se destina en gran medida al mercado externo. La tendencia de la demanda es creciente; en 2006 se exportaron cerca de 6.500 toneladas por valor de 6,5 millones de dólares. Estados Unidos (53 %) e Israel (28 %) son los principales destinos.

En busca de la excelencia

La industria manicera se halla inmersa en un proceso de mejora continua, en el marco del cual los sistemas de gestión de calidad constituyen una herramienta indispensable.

A fines de 2005 se llevó a cabo el Proyecto Piloto “Implementación de Sistemas de Gestión de la Calidad: BPM, POES y HACCP, en Industrias Maniceras de la Provincia de Córdoba” realizado en el marco del Programa Calidad de los Alimentos Argentinos (PROCAL), dependiente de la Dirección Nacional de Alimentos de la SAGPyA, y que contó con el apoyo de la Cámara Argentina del Maní.

Este proyecto persiguió dos grandes objetivos:

  • Implementar Sistemas de Gestión de la Calidad (BPM, POES y HACCP) en plantas industrializadoras de maní.
  • Confeccionar un Protocolo de Diferenciación con las particularidades que comparten las empresas involucradas, a fin de caracterizar y valorizar los productos.

Los beneficiarios del Proyecto Piloto fueron 20 empresas, con fábricas localizadas mayoritariamente en la provincia de Córdoba, con excepción de una ubicada en Buenos Aires y otra en San Luis.

Entre los principales logros de las acciones emprendidas, cabe señalar que 17 empresas pasaron de cubrir el 60% de los ítems generales referidos a Buenas Prácticas de Manufactura, a cumplir con el 86% de los mismos.

Otras 13 empresas pasaron a cumplir el 93% de los requisitos generales del sistema HACCP, habiendo partido del 73%.

En promedio, al comenzar los trabajos de implementación las plantas tenían cubierto el 77% de las inversiones necesarias para alcanzar los requerimientos de BPM y HACCP. Actualmente, cubren el 90%.

Con el mismo criterio, la capacitación de los operarios pasó de cumplir con un 65% de los puntos necesarios para la implementación, a abarcar el 100% de los mismos.

Por otro lado, la documentación y los registros establecidos por las BPM y el HACCP se hallaban cubiertos en un 70%, y actualmente llegan al 100%.

Los avances conseguidos, situaron al sector a la vanguardia de los requerimientos internacionales en cuanto a aseguramiento de la calidad, tales como las últimas normativas europeas que imponen la implementación de HACCP.

Rumbo a la Indicación Geográfica

A partir del Proyecto Piloto, e incluyendo un importante trabajo previo, se llegaron a consensuar las bases de un Protocolo de Calidad y Tipificación para Maní Cordobés, que incluye los atributos físicos y químicos definidos en la normativa comercial vigente en Argentina y en los principales países importadores, incorporando a su vez nuevos atributos de calidad y caracterización fitobiológica. Se estableció así una base sólida sobre la cual definir una Indicación Geográfica legalmente protegida.

En tal sentido, el trabajo realizado prosigue con la presentación efectuada ante la SAGPyA de una solicitud preliminar para el reconocimiento de la Indicación Geográfica “Maní Cordobés”.

Obtener la distinción de IG para el maní argentino, dada sus fortalezas y ventajas, es un objetivo estratégico para sostener el posicionamiento del origen en el cada vez más competitivo y exigente escenario comercial mundial.

Los criterios para la definición del producto que se ofrecerá al mundo como Maní Cordobés, se basan en evidencia científica proporcionada por las instituciones citadas.

La decisión de desarrollar la Identificación Geográfica en este producto se centró en las particularidades muy favorables del sector manicero cordobés:

  • Las ya referidas características agroecológicas de la zona: clima subtropical moderado y suelos franco-arenosos con buen drenaje y apropiada disponibilidad de nutrientes para el normal desarrollo del cultivo.
  • La estructura organizativa de la producción, industrialización y comercialización, coordinadas vertical y horizontalmente, que configura una verdadera red de empresas con intereses comunes. Todas las firmas involucradas se distribuyen en un radio no mayor a 150 kilómetros, lo que determina una gran uniformidad en el modo de producir, procesar y comercializar el producto.
  • La mayor parte del sector coordina sus acciones a través de la Cámara Argentina del Maní, que funciona desde el año 1975 y cuenta con una amplia trayectoria y gran arraigo entre los productores y empresarios del sector.
  • Propiedades específicas de calidad química y nutricional del maní, así como atributos sensoriales diferenciales que benefician la competitividad a nivel internacional.
  • Todos los actores involucrados están dedicados exclusivamente a la exportación, habiendo encarado procesos de mejora continua de calidad de sus productos y procesos, lo que permitió posicionar el maní cordobés en más de 30 países.

Esta alternativa dará respuesta a las necesidades de diferenciación, en el marco de una estrategia general que apunta a consolidar los logros del Maní Argentino en general y cordobés en particular, replanteando la base de calidad sobre la cual se comercializará el producto en el mundo, a fin de mantener el liderazgo arduamente conseguido por el esfuerzo conjunto del sector.

La producción e industrialización de maní constituye una de las más importantes economías regionales. Por éstas y otras muchas fortalezas, el sector manicero merece un especial reconocimiento dentro de la agroidustria argentina de alimentos.

 

...Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos

...Subsecretaría de Política Agropecuaria y Alimentos
...Dirección Nacional de Alimentos

   Ministerio de Economía y Producción - Buenos Aires, Republica Argentina