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1 Peligro: fuente potencial de daño o situación con potencial de daño. |
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La BS 8800 / IRAM 3800 permite integrar los conceptos de salud y seguridad en el trabajo dentro de un sistema de gestión global. Como todo sistema de gestión, la BS 8800 / IRAM 3800 posibilita el uso más eficiente de los recursos y medios para lograr los fines de la organización. Al igual que otros sistemas de aseguramiento de calidad de las series BS e ISO este sistema es de cumplimiento voluntario por parte de las empresas. Su certificación es otorgada por certificadoras habilitadas, que realizan auditorías permanentes para garantizar su adecuada implementación. El proceso para la implementación del sistema de gestión de la salud y la seguridad ocupacional consta de seis etapas: |
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Como paso inicial la empresa debe realizar una revisión de su estado actual respecto de los requisitos de la legislación, las normas o sistemas que la organización ya ha implementado, el estado de avance en materia de medidas de seguridad, y la eficiencia y efectividad de los recursos destinados a la tarea, en la actualidad. Al igual que en otros sistemas de gestión, la dirección debe asumir la responsabilidad primaria de su conducción y reconocer que la norma BS 8800 / IRAM 3800 será parte integral del desempeño del negocio. Esta responsabilidad implica la provisión de los recursos necesarios, el establecimiento y publicación de los objetivos a cumplir (incluida la legislación vigente) y el aseguramiento de su comprensión en todos los niveles. La adecuada competencia, capacitación, el nivel de participación y consulta del personal, junto con la periódica revisión del sistema, son parte fundamental para su cumplimiento y constituyen un compromiso para la dirección de la organización. La siguiente etapa, en la cual se hará especial hincapié, es la planificación del sistema. Esta incluye una serie de generalidades (donde es importante que el éxito o fracaso de los planes pueda ser claramente visualizado), la evaluación de riesgos, los requisitos legales y asumidos por la organización, y los planes y objetivos globales. Para el desarrollo de esta etapa deben adquirirse los conocimientos y competencias que permitan poder planificar el control de los riesgos, cumplir los requisitos legales, el control operativo, la medición del desempeño, las acciones correctivas, las auditorías y la revisión por parte de la dirección. Para una adecuada planificación del sistema es clave la exhaustiva evaluación de riesgos. El HAZOP (análisis de riesgos de los procesos) permite detectar y evaluar de forma sistemática los riesgos presentes en cualquier operatoria. En el proceso de análisis de riesgos, la clasificación de las tareas laborales se realiza dependiendo de la actividad: por áreas geográficas, por etapas en el proceso de producción o prestación del servicio o por ocupación. Para ello es necesario contar con información precisa de las actividades: |
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2 Riesgo: combinación de la probabilidad de ocurrencia de un accidente o incidente junto con la gravedad de sus consecuencias. |
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La fase siguiente es la identificación de peligros, que pueden agruparse en categorías según su tipo: mecánico, eléctrico, fuego y explosión, sustancias químicas o radiaciones. Es necesario preguntarse: ¿existe una fuente de peligro?, ¿quién o qué puede ser dañado? y ¿cómo podría ocurrir el daño?. Una lista de verificación de peligros puede incluir:
Con esta información disponible se procede a evaluar la severidad del peligro y la aceptabilidad del riesgo, analizando las partes del cuerpo más afectadas y la naturaleza del daño (ligeramente a extremadamente dañino). Se verifica el número de personas involucradas, la frecuencia y duración de la exposición, y la posible falla en los servicios, en los componentes de la planta y en los elementos de seguridad. Se analizan además los elementos de protección personal y los actos inseguros por parte de personas que pudieran no advertir los peligros, no tener conocimientos o capacidad para realizar el trabajo, o que simplemente subestiman los riesgos a los que están expuestos o la utilidad de los métodos de trabajo. |
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En este punto, y con el diagnóstico de situación completo, es creíble avanzar en la resolución de los problemas localizados. Si es posible, se deben eliminar los riesgos o combatirlos en su fuente potencial, y de no ser así procurar reducirlos al mínimo posible. Dentro de lo factible hay que adaptar el trabajo al individuo, implementando medidas que preserven a todos los potenciales damnificados y adoptando equipos de protección personal, sólo como última instancia. En todos los casos, se debe contar con procedimientos de emergencia. Como parte de las acciones destinadas a disminuir los riesgos es necesario adoptar sistemas de mantenimiento preventivo e incorporar los avances tecnológicos para mejorar los controles, los cuales deben contar con indicadores de seguimiento proactivos. La fase de implementación y operación (que incluye estructura y responsabilidades; entrenamiento, conciencia y competencias; comunicaciones; documentación del sistema; control de la documentación y preparación para emergencias) es la llave para que el sistema no sea sólo una declaración de buenas intenciones, y cuente con los recursos y los medios para ser realmente efectivo. Para esto es fundamental que el personal, en todos los niveles de la organización, sea responsable de su salud y seguridad y de quienes le reportan. Y sea además consciente de su responsabilidad en la salud y seguridad de la gente que puede ser afectada por las actividades que controla y de la influencia que su acción o falta de acción puede tener sobre la efectividad del sistema de gestión. El control y las acciones correctivas (que involucran monitoreos y mediciones, acciones a tomar, registros y auditorias) aseguran la operatividad y el proceso de mejora continua del sistema de gestión de la salud y la seguridad. La última etapa, que cierra el circuito de mejora, es la revisión del sistema por parte de la dirección. Esta verificación debe ser periódica y considerar el desempeño global del sistema de gestión y sus elementos individuales. Debe prestarse especial atención a los hallazgos de las auditorías y los distintos factores internos y externos que pueden modificar las condiciones inicialmente relevadas, como por ejemplo los cambios en la estructura, la legislación o el desarrollo de nuevas tecnologías. Una vez completado el circuito, y con el foco de la organización puesto en la seguridad, es factible que la confianza en el ámbito laboral esté garantizada, tanto para empleados como para clientes, si se tratara de la provisión de un servicio. La BS 8800 / IRAM 3800 o sistema de gestión de la salud y la seguridad ocupacional permite reducir los siniestros, con la consiguiente disminución de los días caídos, la atención médica, las enfermedades laborales y las prima de las ART. Fundamentalmente, otorga una mejora en la calidad de vida de las individuos y un potencial aumento de la productividad y de los beneficios de la organización.
Ing. Alim. Walter F. García |
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Fuentes consultadas Bureau Veritas Argentina SA; Merisant Argentina SRL; Universidad Nacional de Quilmes; Universidad Nacional de Lanús; Instituto Nacional de Tecnología Industrial. |
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Dirección de Industria Alimentaria
S.A.G.P. y A.
Tel: ( 54 11) 4349-2253
Fax: ( 54 11) 4349-2097 |
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